Desde primeras horas de la mañana del jueves, los alumnos/as se sumergieron en una jornada de aprendizaje activo, donde llevaron a cabo diversos contextos de aprendizaje (ciencias, nuevas tecnologías…) bajo la guía de maestros/as.

Tras esta primera parte del día, los alumnos disfrutaron de talleres especializados que abarcaron una amplia gama de temas, desde aprender sobre apicultura y su importancia para el medio ambiente hasta mantenerse activos con sesiones de aeróbic. Además, se impartieron talleres sobre educación vial, fomentando hábitos seguros y responsables en las vías públicas.

La tarde estuvo marcada por un momento de especial importancia: la convivencia con las familias de acogida. Esta experiencia no sólo permitió a los niños/as sumergirse en la vida cotidiana de sus anfitriones, sino que también fomentó el intercambio de experiencias entre familias y comunidades.

Mientras tanto, los maestros/as aprovecharon esta oportunidad para llevar a cabo reuniones de coordinación entre los distintos centros educativos participantes. Estos momentos no solo facilitaron el intercambio de buenas prácticas pedagógicas, sino que también sentaron las bases para futuras colaboraciones.

Sin duda, este intercambio deja una huella duradera en el camino hacia una educación más enriquecedora y comunitaria.